Es importante que los hábitos de alimentación saludables se establezcan desde los primeros años de vida y para enseñar buenos hábitos lo importante es dar el ejemplo como padres, pues las pautas y conductas que se quieran enseñar a los niños deben ser utilizadas por los adultos. Desde sus primeros años, los pequeños pueden tener preferencias y rechazos hacia determinados alimentos, pero es función de la familia orientar el consumo de alimentos en cantidad, variedad y frecuencia hacia una alimentación equilibrada y saludable para: 1. Que conozcan una gran variedad de alimentos y aprecien distintas formas de preparación. 2. Que sepan y aprendan a diferenciar aromas, sabores y texturas. Evitar que coman siempre sólo lo que les gusta, incitando a que prueben nuevos alimentos como si se tratase de un juego. 3. Que la familia contr...